Cafes: los lentes con los cristales cafes se usan para filtrar las radiaciones azules, aumentar la
profundidad del campo, produciendo un efecto relajante y aumentando el
contraste. Afirman los expertos que estas son los mejores lentes para las
personas que padecen miopía.
Verdes: los lentes con los cristales
verdes permiten percibir los colores del entorno sin apenas
alteraciones, ya que reducen la luz sin interferir en la visión. Son
adecuados para las personas que sufren hipermetropía y para practicar deportes
náuticos.
Amarillos: los lentes con los cristales
amarillos mejoran el contraste en días nublados, porque proporcionan más
profundidad en situaciones de baja luminosidad. No se recomiendan para manejar y además, si se sufre fotofobia, este tipo de cristales
serían los adecuados.
Grises: los lentes con los cristales grises transmiten uniformemente la luz, es decir, el cambio de color es
inapreciable y la vista no se cansa. Respeta mejor los colores naturales
y es ideal para la conducción.
Naranjas: los lentes con cristales naranjas se suelen emplear como complemento y no como protección solar, aunque es un color idóneo en condiciones de poca luz como por ejemplo, la conducción de noche
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